jueves, 24 de junio de 2010

Lo de Sara Carbonero se sale de madre


Mi más completo apoyo a Fernando González Urbaneja.

Nunca me gustó ser corporativista, pero es que en este caso tiene toda la razón

¿Qué puñetas hace una niñata llamada Sara, de apellido creo que Carbonero, luciendo su palmito justo al lado del lugar donde su novio está entrenando minutos antes de disputar un trascendental encuentro como portero de la selección española en el mundial de Suráfrica?

Eso ha venido a preguntarse González Urbaneja, presidente de la asociación de la prensa, y yo no puedo menos que estar absolutamente de acuerdo con él

Ya está bien de circo, compañeros

El equipo que se mueve con esta muchacha sabe que están haciendo de todo menos periodismo

Esa muchacha sabe, cuando se presta a lo que se presta, que podría hacer su trabajo de otra manera mucho más discreta, más profesional y más digna.

Si se presta a ser encuadrada en una salidilla con su novio de fondo, sabe que el valor de su información es cero y el del morbo que acompaña a su ubicación se eleva al cien por cien. Nadie se va a interesar por lo que cuente… sólo por dónde está colocada. Ella sabe, como saben quienes defienden lo indefendible, que apostar por esa opción es prostituir la esencia de su oficio.

Argumentan los jefes de la tal Sarita, los que se lo llevan calentito gracias al revuelo que despierta la muchacha, que tanto ella como la cadena tienen perfecto derecho a hacer lo que hacen. Pero los jefes de Sarita y Sarita misma saben que si quisieran podrían haber optado por una actuación a pie de campo mucho menos “cantosa”. ¿Intervenir en directo a pie de césped? Por supuesto, faltaría más, pero ¿hace falta hacerlo tan evidente? ¿Entrevistar a su novio, cuando acaba el partido? De acuerdo. Pero hasta ahí, chica, hasta ahííííí...

Pues no, hay que alimentar al monstruo.

Me recuerda este asunto a esa reportera o ex reportera de un programa matinal de televisión, todo fashion ella, creo que se llama Beatriz Trapote, que debe su relevancia mediática no a su trabajo, sino a ser o haber sido novia de un hermano del famoso torero lumbreras conocido como Jesulín de Ubrique.

Si sarita carbonerito sigue por el camino que va, la veo como la trapote despelotándose en interviú dentro de pocas semanas

Amigo Urbaneja, gracias por salir a la palestra en este asunto y remover un poco el cedazo. Nos hacía mucha falta

J.T.

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