miércoles, 31 de agosto de 2011

Hace sólo treinta y un días...



- Mourinho todavía no le había metido el dedo en el ojo a Tito Vilanova

- Irene era sólo un nombre de mujer

- El Barça tenía dos copas menos

- A Benedicto todavía no le había pillado la tormenta de Cuatro Vientos

- Los confesionarios efímeros del Retiro aún estaban sin usar

- DSK era un presunto violador

- Los contratos temporales de dos años no eran encadenables

- Nos acababan de presentar a la famosa "prima de riesgo" y un mes más tarde parece como si fuera de la familia de toda la vida

- ZP no se hablaba con Rajoy y ahora se besan en los morros

- Rubalcaba todavía se hablaba con ZP

 J.T.




martes, 30 de agosto de 2011

"Deprisa, deprisa"

Deprisa, deprisa

Corred, que viene la Merkel y nos pilla sin los deberes hechos

Deprisa, deprisa

Pilla lo que puedas, salva los muebles que puedas y huyamos antes que lleguen los mercados financieros con las rebajas

Deprisa, deprisa

Trinca todo lo que puedas y vámonos ya, que llegan las elecciones

El "aire" de lo que está pasando con la reforma de la Constitución me recuerda, pero mucho, la película "Deprisa, deprisa", con la que Carlos Saura ganó el Oso de Oro de Berlín en 1981, que contaba la historia de una pareja de delincuentes que se dedicaba a asaltar bancos.

Treinta años después, la oración se vuelve por pasiva: los asaltantes son los bancos y los ciudadanos los asaltados con la complicidad de una pareja (Zapatero y Rajoy) que quieren "salvar" lo que puedan para pagarle a sus proveedores habituales de "costo" (mercados, Europa...) la pasta gansa que les deben.

Deprisa, deprisa

En Agosto. Con pleno extraordinario, que la situación es grave. Aprobemos el techo de déficit ya.

No saben, pobres, que como en la película de Saura, acabarán hechos polvo después de hacerle a los canallas el trabajo sucio.

Y como en la canción "Me quedo contigo", que interpretaban los Chunguitos y que formaba parte de la banda sonora de la película, ZP y RJ se cantarán el uno al otro:

Si me das a elegir
Entre tú y la riqueza
Con esa grandeza
Que lleva consigo, ay amor
Me quedo contigo

Si me das a elegir
Entre tú y la gloria
Pa que hable la historia de mi
Por los siglos, ay amor
Me quedo contigo

Si me das a elegir
Entre tú y mis ideas
Que yo sin ellas
Soy un hombre perdido, ay amor
Me quedo contigo

Ellos juntitos. Nosotros, desvalijados.

Deprisa, deprisa

J.T.


domingo, 28 de agosto de 2011

Por favor, que no nos salven tanto y que nos expliquen clarito qué puñetas está pasando

Alonso y Sáenz de Santamaría: idilio súbito 
para proponer juntos (Psoe y PP) la reforma de la Constitución

Es lo que más nos conviene
No hay otra solución
Cualquier otra opción sería mucho peor
Es lo que tenemos que hacer si no queremos que todo se vaya al garete

Estas son algunas de las frases con las que los políticos vienen justificando en los últimos días la decisión de modificar la Constitución para fijar un techo de déficit presupuestario, o ampliar la edad de los contratos en prácticas, o encadenar los contratos temporales…

Ni un argumento

Ni una explicación mínimamente sólida. Frases así le he oído estos días a José Montilla, Elena Salgado, Rubalcaba… Ideas que, para que no quepa ninguna duda de por dónde van todos los tiros, suscribe encantada la derecha.

Pero ningún argumento

Si lo que ocurre es que manejan informes, o datos, terribles, preocupantes para nuestro futuro… ¿por qué no dejan de actuar de manera paternalista y los comparten con todos? ¿por qué no nos los cuentan, que ya somos mayorcitos?

¿Por qué se empeñan en salvarnos tanto? ¿por qué para “salvarnos” se dedican a ampliarnos la edad de jubilación, a perpetrar reformas laborales impresentables y a intentar metérnosla doblada con reducciones de sueldos por decreto o intentos de aprobar negociaciones colectivas claramente lesivas para los intereses de la poca gente que todavía tiene un puesto de trabajo?

Si todo está tan mal, si el riesgo de que todo se vaya al garete es tan alto, por qué no nos lo explican clarito, con pelos y señales y se dejan de monsergas?

Me temo que porque les importa más salvar su culo, aunque para ello nos pongan, sin ningún tipo de escrúpulos, a los pies de los caballos, a merced de quienes han decidido que impere la ley del más fuerte. De quienes mueven los dineros y con ellos las voluntades de los que gobiernan.

Una de dos: o quienes nos gobiernan son ya -definitiva y únicamente- meros muñecos de quienes mueven los hilos, o son directamente sus cómplices. O las dos cosas.

J.T.

martes, 23 de agosto de 2011

Si hasta los economistas están aterrados… pues entonces apaga y vámonos


No es verdad que los mercados financieros sean eficientes, ni que favorezcan el crecimiento económico, ni que sean buenos jueces de la solvencia de los Estados.

Tampoco es cierto que el alza excesiva de la deuda pública sea consecuencia de un exceso de gasto, coartada ahora usada para instar a las rebajas en los presupuestos de educación, sanidad, pensiones… No es verdad que esos recortes reduzcan la deuda como tampoco lo es que eso hipoteque el futuro de nuestros nietos.

Mienten quienes se empeñan en hacernos creer que hay que tranquilizar a los mercados financieros para poder financiar la deuda pública.

Nos han engañado con el euro y nos engañan cuando nos aseguran que la moneda única actúa como escudo contra la crisis.

Quienes proclaman que la Unión europea defiende el modelo social europeo tienen más cara que espalda.

Y quienes divulgan que la crisis griega ha permitido por fin avanzar hacia un modelo económico y una verdadera solidaridad europea manipulan y desvían el tiro a sabiendas.

Hasta aquí los principales puntos del “Manifiesto de economistas aterrados” editado por Barataria en la colección Pasos Perdidos, que va ya por su quinta edición.

El libro-manifiesto, elaborado por cuatro economistas franceses y respaldado por varios miles más, no se limita a enumerar lo que tienen clarísimo que son mentiras palpables y evidentes de los neoliberales, por mucho que éstos se empeñen en repetirlas una y mil veces para intentar convertirlas en verdad.

Por esos proponen 22 medidas con las que, están convencidos y lo argumentan, podría combatirse lo que nos está pasando con esto de la crisis y que nos tiene a todos tan “acojonaos”.

Entre esas medidas hablan de la necesidad –al contrario de lo que tantos se empeñan en hacernos creer- de mantener el nivel de protección social e incluso mejorarlo (con seguros de paro y apoyos para el acceso a la vivienda). 

También urgen a que hagamos lo posible por quitarnos de en medio a las llamadas “agencias de calificación financiera”, y a apostar cuanto antes por un presupuesto europeo y una fiscalidad conjunta.

Como el libro es corto y merece la pena bebérselo de un tirón, no os lo destripo más.

Hay también una página web en la que pueden consultarse los nombres de todos los economistas que se han propuesto desenmascarar a quienes nos están amargando la vida preconizando la supuesta bonanza de las políticas neoliberales. Quieren desenmascarar a los especuladores y a los políticos, que son sus títeres y también sus cómplices en este espantoso y global “timo de la estampita”.

J.T.

domingo, 21 de agosto de 2011

Rap en la despedida





Aquí la letra:


Te voy a hablar de una empresa,
 enorme, densa, consolidada y sagrada,
 multinacional, poderosa y letal basada
 en la mentira, la ambición y el capital.

 Miles de comerciales inundan hogares
 con prejuicios en forma de crucifijos
 leyendo su best-seller, su pútrido best-seller
 su manual divino de sumisión perenne.

 En sus inicios decían seguir
 al hijo de un dios y cada tres por dos
 demostraron que el dinero y el poder
 eran su fe, su eterna religión.

 América es conquistada, arrasada.
 La Iglesia avanza a punta de lanza.
 Su divino genocidio arrambla
 con la vida y por oro la cambia.

 ¿Qué hacer? Apostata.
 La Iglesia mata,
 siempre con total impunidad,
 siempre ocultando la verdad.
 Grita y oponte:
 no en mi nombre.

 La razón siempre fue perseguida.
 ¿Cuántas personas perdieron la vida?
 Todo lo que no sea fe, será mentira.
 El pensamiento racional era herejía.

 No quiero estar atada a sus cadenas,
 quiero ser libre mientras me condenan.

 Promulgaron el voto de riqueza,
 asesinaron, torturaron con la sinrazón,
 con la Inquisición, con ese poder otorgado por su dios.

 La mano siempre fue tendida al pueblo,
 apretadita a la altura del cuello;
 las alianzas vestidas de blanco,
 amigas de Hitler, Mussolini y Franco.

 ¿Qué hacer? Apostata.
 La Iglesia mata,
 siempre con total impunidad,
 siempre ocultando la verdad.
 Grita y oponte:
 no en mi nombre.

 Intentarán evangelizar a voces,
 a roces, con la mano en la entrepierna
 de menores y te exigen castidad
 los mismos que violan con impunidad.

 Y más y más pedofilia silenciada.
 Mañana el mismo cura en el sermón
 hablará de aborto, infierno y perdición
 criticando al diferente como colofón.

 Predican a golpe de rosario,
 de cheque y talonario
 esos malditos farsantes,
 que condenan el uso del condón
 fomentando la culpa y la confesión.

 Si lo sientes, actúa. Límpiate esa basura.
 Quítate de encima su asqueroso olor
 a soberbia y a usura. No rindas pleitesía
 y haz la apostasía exige la excomunión.

 ¿Qué hacer? Apostata.
 La Iglesia mata,
 siempre con total impunidad,
 siempre ocultando la verdad.
 Grita y oponte:
 no en mi nombre.

 No quiero estar atada a sus cadenas,
 quiero ser libre mientras me condenan.
 Sus bendiciones son sólo hipocresía,
 autoridad, castigo y jerarquía.
 

martes, 16 de agosto de 2011

JMJ: El megamárketing


Ni la Coca Cola, ni Microsoft, ni Apple, ni la Ford, ni Obama... La capacidad de la iglesia católica para utilizar todos los resortes de difusión a su alcance, promocionar así su negocio y propagar su marca comercial no la iguala nadie.

La primera regla de la promoción -vender lo que piensas hacer mucho antes de que empieces a hacerlo- la manejan de manera magistral.

Meses lleva la organización contándonos "urbi et orbi" -que dirían ellos- con pelos y señales el encuentro de jóvenes católicos en Madrid con el jefe máximo a la cabeza: caldeando el ambiente, propiciando el clima que más les conviene.

Yo no sé exactamente lo que van a hacer, pero sí lo que nos cuesta, el número de días que Madrid va a estar literalmente tomado y hasta la cifra exacta de impolutos confesionarios blancos instalados en el parque del Retiro. Todo esto lo sé, sobre todo, gracias a quienes se oponen al sarao, que han caído en la trampa de promocionar el asunto hablando contra él día sí día no desde hace ya semanas.

Aplican así los organizadores la segunda regla de la promoción: consigue que tus detractores hablen mucho de tí. Es propaganda gratuita.

Objetivo conseguido, pues, para los promotores del "evento". Han generado expectativas y cuando la cosa está a punto, cuando se acerca la fecha de comienzo, se busca  -tercera regla- una guinda para el pastel. Algo que impacte y que obligue a dedicar nuevos titulares: Vamos a ser buenos -se han dicho- y vamos a perdonar a toda aquella mujer que confiese haber abortado. Pero la oferta sólo estará vigente durante la semana del encuentro y acudiendo a los confesionarios blancos del Retiro. Rebajas de verano con fecha de caducidad. Promoción, promoción.

Una vez creado el ambiente adecuado, procede vender lo que se está haciendo -cuarto paso-. Y en esto es en lo que más profesionales son. Con los medios propios y los de los afectos ya tienen asegurada la repercusión: televisiones, radios, periódicos y, por supuesto, internet están estos días invadidos por lo que ocurre en Madrid durante el ecuador del mes de Agosto.

Porque lo hacen, claro está, en Agosto. Si cualquier asunto mínimamente vendible incrementa en Agosto sus posibilidades de repercusión, éste tiene asegurado que nadie le va a quitar las primeras páginas: los políticos medio missing, las instituciones cerradas, los gabinetes de comunicación a medio gas... como la bolsa no pegue otro petardazo, nadie le quita a los católicos la apertura en los informativos durante estos siete días seguidos.

Cuando finalicen los fastos, ya sólo les quedará por hacer, y lo ejecutarán con la misma maestría que los anteriores pasos, el último punto en el proceso de promoción y marketing: consiste en contar lo que se ha hecho. Explicarlo con detalle y divulgarlo -con las conclusiones, los textos, las fotos, los videos, las experiencias- durante meses o años. Y a buen seguro que lo harán a conciencia.

Al margen de las consideraciones que nos produzca el producto que venden, hay que reconocer que, como buenos supervivientes que son -dos mil años ya- se comportan como verdaderos maestros adaptándose a los tiempos. ¡qué peligro!

J.T.

lunes, 8 de agosto de 2011

¿Que el mundo se está hundiendo? ¡Ya me preocuparé en septiembre!


El mundo se está yendo al carajo y los despachos de los políticos, vacíos. Suenan los teléfonos en las oficicinas de los poderosos y nadie los levanta porque las secretarias y los ayudantes, los secretarios de las secretarias y las ayudantes de los ayudantes están en el chiringuito con la cerveza en la mano mientras aguardan impacientes... la ración de boquerones.

Quien tenga un problema burocrático que resolver, que espere unas semanitas: las ventanillas de atención al público no son para el verano.

¿Que la bolsa se hunde? Ya me preocuparé en septiembre
¿La prima de riesgo se dispara? Ya me preocuparé en septiembre
¿Riesgo de quiebra? ¿Amenaza de rescate? Uf, qué pereza

La Merkel, ZP, Berlusconi, Sarkozy... parecen funcionar estos días al ralentí a pesar de la que está cayendo.

Si haga lo que haga -parecen pensar- no tengo manera de atajar la ruina que tengo encima, pues haré lo que tenía planeado: tocarme los güevos las dos semanitas previstas, que hay que tomar fuerzas para la que me espera apenas vuelva.

La putada es que esta vez no es una frase hecha: el mundo se está literalmente yendo al carajo y estos cretinos están a por uvas.

Me recuerdan la historia de aquel hombre de negocios inglés que, mientras jugaba al golf un sábado por la mañana en los aledaños de su enorme mansión de fin de semana a cien kilómetros de Londres, recibió la llamada del responsable de seguridad de uno de sus múltiples negocios situados en los alrededores de la capital.

- Señor, lamento decirle que una de sus fábricas está ardiendo. Una ruina. Todo destruído.
- No me diga, contestó el acaudalado gentleman. ¡Pues vaya disgusto que me voy a llevar el lunes!

J.T.

martes, 2 de agosto de 2011

La senectud al poder


 Mariano Rajoy Brey, 56 años


Alfredo Pérez Rubalcaba, 60 años


Javier Arenas Bocanegra, 53 años


José Antonio Griñán Martínez, 65 años

Los 4 suman en total 234 años  
Edad media: 58,5 años

Barbudos, canosos, calvos, serán candidatos tras toda una vida de eternos segundos e incluso de perdedores reincidentes.

Rajoy, Rubalcaba, Arenas, Griñán... Esto es lo que ha dado de sí la cosecha de los últimos años.

Hablaba yo el otro día en este blog de lo higiénico que sería que, en todos los órdenes de la vida, en cualquier estructura de poder empresarial, social, institucional, civil o militar, quienes frisamos la sesentena nos planteáramos la conveniencia de dar un paso atrás.

De lo saludable que sería apostar por veinteañeros, treintañeros -y algún cuarentón que otro- para la primera línea de batalla. Pero está claro que pincho en hueso

Claro que si buscamos juventud en los entornos de estos tozudos prejubilables, la verdad es que no sé qué decir. Hay poco y lo que hay, al menos lo que yo conozco es, en un buen número de casos, para salir directamente corriendo. Sin parar

Pero algo habrá que hacer, ¿no? En seis meses, en Andalucía y en toda España estaremos gobernados por veteranos canosos que no se cortarán un pelo a la hora de vendernos, si se tercia,  renovación y modernidad como el que más.

El patio (plazas, rotondas y edificios emblemáticos) repleto de veinteañeros (15M) pidiendo paso, repitiendo una y otra vez que no les gusta lo que hay, que no les representan, que las cosas deberían ser de otra manera y estos barbudos, calvos y canosos... a lo suyo.

Como si oyeran llover

J.T.