viernes, 16 de enero de 2015

Yo, con Tania


Lo más llamativo del intento de linchamiento de Tania Sánchez Melero es que, todo lo que va ocurriendo desde que se decretó su caza y captura, era perfectamente previsible. Tania simboliza muchas de las cosas que dejan en evidencia esas maneras añejas y cainitas con las que durante tantos años se ha hecho política en este país.

Habla claro, es inteligente, transmite frescura y... es mujer. Demasiado para el cuerpo de tanto profesional de la supervivencia pertrechado en chiringuitos casposos y resquebrajados, funcionarios de viejos aparatos que ven cómo pasan los años y no se comen un colín, salvo el sueldo y las prebendas que arrancan para ir tirando y continuar viviendo del cuento.

Que Inda y Marhuenda pongan a Sánchez Melero a caer de un burro forma parte, si se me apura, de las reglas del juego, que el ABC, La Razón, y demás prensa de derechas no cejen en su afán por desprestigiarla tampoco rechina excesivamente. Pero lo que ya cuesta más entender es que sea dentro de su propia formación política donde más interesados parecen estar en buscarle la ruina y quitársela de en medio. O quizás no cueste tanto entenderlo porque ya se sabe: ¡Al suelo, que vienen los nuestros!

Tania Sánchez Melero estorba y mucho. Estorba a la derecha porque le canta las verdades, les desmonta sus argumentos y expone los suyos con irrefutable convicción y solvencia. Y estorba a los suyos porque de toda la vida de dios, a los aparatos nunca le gustaron los versos sueltos. Han hurgado en su pasado de concejal hasta dar con un episodio que para algunos expertos no posee ningún componente delictivo y para otros es excusa perfecta para poner una denuncia en los juzgados a ver qué cae.

La denuncia la ha puesto la derecha, claro, pero los presuntos trapos sucios los sacaron al aire desde las oficinas de Izquierda Unida. Hasta este mismo viernes, sus propios "compañeros", si es que se les puede llamar así, no han validado unas primarias que hace ya dos meses que Tania ganó de calle para ser candidata a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Le han perdonado la vida con 56 abstenciones, 22 votos en contra y de puto milagro ha conseguido 58 votos a favor. Entre los 13 diputados que tiene como compañeros en la Asamblea de Madrid, la mayoría está en su contra.

Hay un componente de envidia, es verdad, en esta manera de proceder, pero la razón principal es la resistencia al cambio de quienes manejan el chiringuito, que hace muchos años que se olvidaron de las necesidades y los intereses de quienes les votan y se dedican únicamente a chupar del bote legislatura tras legislatura. ¿Que administran migajas? Mejor, así pueden continuar marcándose el rollo sin quemarse del todo. Y claro, alguien como Tania, que es la cara visible de toda una corriente cada vez más extendida en Izquierda Unida, no deja de ser una mosca cojonera que amenaza con desbaratarles el cómodo tinglado en el que llevan tanto tiempo tirándose el rollo.

Estas cosas hay que decirlas lo más alto y claro posible porque el cainismo en política tendría que estar penalizado. No puede ser que cada vez que surge un grupo joven y fresco que se propone cambiar desde dentro el funcionamiento de una organización, las viejas glorias desplieguen todas sus baterías para cortarles las alas y echarles o hacerles volver al redil: "Les dejamos entrar en las listas, consiguen un puesto en el Ayuntamiento o en la Asamblea, y en vez de disfrutarlo, de relajarse y gozar, se ponen a pensar y a complicarnos la vida -piensan los prebostes que controlan el aparato"

Eso es lo que le ocurre a Tania, a Mauricio Valiente y a todo el grupo de savia nueva que se propone cambiar las cosas en Izquierda Unida. Que los de siempre quieren seguir mangoneando y para ello le viene de fábula que la derecha coincida con sus intereses y actúe como tonto útil: "Tú me la empuras y así yo tengo la excusa perfecta para quitármela de en medio".

Como decía al comienzo, todo lo que va ocurriendo desde que se decretó la caza y captura de Sánchez Melero era perfectamente previsible. Porque el problema no es solo ella, que estoy seguro acabará saliendo airosa de tanta embestida despiadada. El problema es la utilización del asunto Tania como aviso a caminantes para disuadir a todos aquellos que, como ella, están dispuestos a pelear para que las cosas en la izquierda dejen de ser como siempre han sido y mejoren de una puñetera vez. Tengo para mí que esta vez, los de siempre, han pinchado en hueso.

J.T.

1 comentario:

  1. Tania NO es lo que parece.

    Compañero periodista Juan: NO he podido resistir al leerte dar una serie de datos e impresiones que creo útiles para los que no han tenido la oportunidad de conocer a Tania de cerca.

    Conocí a Tania en los programas de La Tuerka, que hizo Pablo Iglesias, en mi casa (Canal 33) durante un poco más de un año. Era del grupo de invitados "comodín" es decir, cuando hacía falta Pablo cogía el teléfono y Tania allí estaba.

    Es cierto que ha mejorado y mucho su presencia, ya no viste tan "casual" incluso ha mejorado su forma de expresión, tanto verbal como no verbal. Pero sus formas siguen siendo las mismas. Como diría un conocido periodista deportivo OJO AL DATO. Fue muchas veces a mi televisión pero ya no quiere ir. Esto me lleva a pensar que cuando iba no era por un tema político o periodístico, iba por otra cosa. ¿Me entiendes?

    Fui testigo de como habiendo mucha gente comprometida y útil en Izquierda Unida ella consigue ser tertuliana en las televisiones gracias a la recomendación de Pablo. Es un auténtico caballo de Troya de Podemos en IU por eso no me resulta raro que la gente de IU quiera mantener sus siglas y NO pueda verla con buenos ojos. La calculada ambigüedad del nuevo líder, Garzón, puede llevarles a muchos disgustos. O se defiende IU y su identidad propia o todo se va al traste.

    Hay gente en IU muy válida, pero claro NO son coleguitas de Pablo Iglesias para introducirse y hablar en televisiones, no son hijos de concejales (parece que heredaron el cargo) e incluso han trabajado y trabajan en otros asuntos que NO son política. Es lógico que NO vean con buenos ojos a quien representa una forma rechazable de hacer política. Y cuento lo que he visto. Creo que también su gestión en Rivas NO es precisamente para echar cohetes, favoreciendo a su hermano y diciendo que NO sabía nada de nada de nada.

    En la actualidad seguimos esperando la entrevista de Tania en nuestras televisión. Supongo que NO quiere ir porque ya no está Pablo aquí ¿no?

    Gracias por publicar mi comentario. A vuestra disposición,

    Enrique Riobóo
    www.canal33.info

    ResponderEliminar